Griffiths (Anfac) denuncia que «no puede ser que alguien que se compre un coche eléctrico tarde dos años en cobrar la ayuda»
– Y que entre Múnich y Frankfurt haya 178 puntos de recarga y solo 26 entre Madrid y Valencia
MADRID, 18 (SERVIMEDIA)
El presidente de la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac), Wayne Griffiths, advirtió este martes en el Foro de la Nueva Economía sobre el retraso en España de la implantación del vehículo eléctrico y denunció que «no puede ser que alguien que se compre un coche eléctrico tarde dos años en cobrar la ayuda».
Así se expresó Griffiths en este evento organizado por Nueva Economía Fórum en Madrid, donde explicó que a fecha de hoy las ventas de vehículos híbridos, enchufables y eléctricos apenas representan el 10% del total, frente a una media del 21% en Europa.
«En doce meses no hemos avanzado casi nada y seguimos a la cola de Europa», lamentó el presidente de la patronal, quien señaló que «los portugueses, con menos renta por cápita, se lo han tomado en serio» y han llegado ya al 27% del mercado.
Por ello, afirmó que «necesitamos medidas urgentes para acercarnos a Europa porque no podemos perder otro año» y aseguró que «el Gobierno coincide con que tenemos que acelerar esta transformación».
«Hay que copiar lo que hacen otros países», sostuvo Griffiths, quien apuntó que a los ciudadanos «hay que ayudarles a dar el paso y a que lo vean como una oportunidad y no como una obligación o una prohibición».
Entre las medidas, indicó que las ayudas han de ser directas y aplicarse en el momento de la compra y que «la fiscalidad debe ayudar más». Como ejemplo, explicó que en Portugal las empresas «compran más coches porque tienen beneficios fiscales y les resulta rentable».
Asimismo, denunció la poca dotación de la red de recarga, con menos de 20.000 puntos en estos momentos cuando el objetivo es cerrar 2023 con 45.000 puntos de recarga. A este respecto, denunció que entre Múnich y Frankfurt hay 178 puntos de recarga mientras que entre Madrid y Valencia hay solo 26.
En relación con la tardanza en el despliegue de estos puntos de recarga, denunció que en España se necesitan entre 25 y 46 meses para desplegar uno, cuando «se debería tardar solo unas semanas». «La tecnología lo permite pero la burocracia lo impide», sentenció.
Por último, se preguntó «¿De qué sirve fabricar vehículos eléctricos en España si no se compran aquí?» y concluyó que «la electrificación supone una gran oportunidad para España».
