26 de abril de 2024

Un Concorde con billetes baratos: ¿ficción?

Volar, algo que para muchos es un placer y para otros una verdadera tortura. Si además, tu destino es transoceánico, más vale que vayas preparado para pasar horas sentado en un asiento, en muchos casos sin apenas espacio, y veas correr el reloj como si se hubiera ralentizado.

Pese a que el avión es el medio de transporte más efectivo y que más tiempo ahorra a los que necesitan viajar con asiduidad, lo cierto es que sigue habiendo trayectos que al pasajero se le siguen haciendo largos.

De ahí que en un momento dado de la historia de la aviación se apostara por lanzar los Concorde, aviones con una potencia nunca vista que acortaban las horas de vuelo hasta límites hasta entonces nunca vistos. El problema que tuvieron, entre otros, fue el precio de los pasajes, que se hacían inalcanzables para muchos.

Sin embargo ahora volvemos a oir hablar de ello. Se trata del proyecto Boom, que pretende viajar hasta 2.6 veces más rápido que cualquier avión comercial y hasta el doble de rápido que la velocidad del sonido. Suena a ciencia ficción, pero nada más lejos de la realidad.

La idea es conseguir acortar los trayectos a poco menos de la mitad de lo que son actualmente y, ¿quién está detrás de ello? Virgin.

La compañía de Richard Branson ya ha puesto los ojos en ellos y pretende hacerse, a la finalización del proyecto, con más de 10 aparatos que revolucionarían los viajes de la élite. Aunque los precios se abaratarían con respecto a los que aparatos similares tuvieran vigentes, un vuelo de ida y vuelta aún estaría lejos de los bolsillos de la gran mayoría de los pasajeros, cuya tendencia parece que sigue siendo apostar por las low cost.

Quizás también te interese:  Valitae certifica el estado de los vehículos de segunda mano para compradores y vendedores

5000 dólares por un viaje de ida y vuelta pocos podrían pagarlo de forma continuada, sin embargo Virgin tiene claro quién será su usuario: el perfil del hombre/mujer de negocios sin tiempo que perder.

Para hacerlo, han echado un ojo a las mejoras que necesitaría hoy en día un Concorde, modificando en el proyecto tanto la aerodinámica como los materiales y apostando, en primer lugar, por la fibra de carbono y los interiores, de forma que sólo llegarían a viajar en él, pero con muchas más comodidades, hasta 40 personas frente a las 100 que podían tener asiento en el Concorde.